El fin de semana se presentó complicado luego de la rotura de tres motores. Sin embargo, Marcos Quijada no bajó los brazos y afrontó la final con mucha entereza y con la tranquilidad de llevar una buena ventaja sobre sus perseguidores en la Copa de Oro.
Con una enorme labor, el Dole Racing reparó uno de los motores dañados y salió a disputar la exigente final en San Juan Villicum. Luego de largar en el puesto 27, el joven de Escobar fue avanzando posiciones hasta recalar al 13° puesto. Pero nuevamente, el medio mecánico lo dejaba a pie. Una nueva rotura lo obligó a desertar de la competencia. Estacionó al Dodge a un costado y esperó a que terminara la competencia. Ya no dependía de él, sólo del resultado del resto de los demás candidatos.
El salteño Jeremías Olmedo (Ford) intentó avanzar pero llegó hasta el 11° lugar, lo mismo el sanjuanino Tobías Martínez (Chevrolet) quien batalló con Thomas Micheloud (Ford) y llegó 4°. Así las cosas, Quijada hizo prevalecer la diferencia y se consagró campeón. Fue dueño de una gran regularidad. Logró ser el vencedor en dos finales, obtuvo 5 pole position, ganó seis series y cosechó ocho podios en total. Este título lo habilita a correr en Turismo Carretera, previo paso por el TC Pista en la próxima temporada.
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