En medio de la incertidumbre que generó su lesión en los cuartos de final de la Copa Argentina contra Gimnasia y Esgrima La Plata, en las últimas horas Boca recibió una grata noticia que trajo mucha tranquilidad puertas adentro: Kevin Zenón solo presenta un esguince en el tobillo izquierdo, lo que significa que no sufre una fractura y su recuperación será más rápida de lo esperado.
El joven volante, quien había ingresado en el complemento del partido que se terminó definiendo por penales en favor para el Xeneize, tuvo que abandonar el campo tras recibir una fuerte patada de Nicolás Garayalde. La preocupación del cuerpo técnico, encabezado por Fernando Gago, fue evidente, dado el impacto que Zenón tiene en el esquema del equipo y lo que puede aportar dentro del mediocampo de un plantel que debe seguir mejorando mucho.
Afortunadamente, el parte médico indica que Zenón estará fuera de las canchas por aproximadamente 10 días, lo que le permitirá regresar justo a tiempo para la semifinal contra Vélez, programada para principios de noviembre. Esto le da a Gago un alivio muy grande, ya que el jugador viene demostrado ser un pilar importante en el equipo de la Ribera que dio un paso importante para comenzar a encontrar la regularidad necesaria de cara a un 2025 que será muy demandante.
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